Diario Financiero

Las claves de la primera Enade presidencial de Boric

▪Reforma tributaria “conversada” y con responsabilidad fiscal: la invitación al empresariado ▪El orden público y el manejo de las policías: la prueba de fuego para el nuevo gobierno

POR ROCÍO MONTES

Recitando el poema “Cementerio de Punta Arenas” de Enrique Lihn, comenzó el Presidente electo, Gabriel Boric, su exposición en el Encuentro Nacional de la Empresa (Enade) 2022, haciendo referencia a un tema que espera abordar desde el inicio de su gestión: la desigualdad.

“Nuestro actual statu quo frena el desarrollo económico y profundiza el malestar social”, sentenció el futuro mandatario, y afirmó que si de la mano del proceso constituyente el país no avanza en soluciones materiales “no habremos solucionado las causas que nos llevaron al estallido social”.

El futuro jefe de Estado afirmó: “Mis palabras respecto a la gradualidad y a la responsabilidad fiscal no eran un disfraz de campaña de segunda vuelta, sino una convicción profunda”. A quienes han hablado de que hubo un Boric en primera vuelta y otro en segunda respondió tajantemente: “Soy el mismo. Mis convicciones siguen intactas”.

Afirmó que “las finanzas públicas hoy día en Chile están estresadas”, y explicó que su gobierno tendrá tres objetivos económicos clave este año: fomentar un crecimiento basado en estimular la inversión; recuperar los empleos formales rezagados por la pandemia -sobre todo de jóvenes y mujeres-; y hacerse cargo de la crisis climática.

“Así como no podemos depredar hoy la naturaleza que le daremos a quienes hoy son niñas y niños, tampoco podemos endeudarnos de manera irresponsable con cargo a la capacidad de gasto de futuras generaciones”, dijo Boric.

Así, prometió mantener la meta de un déficit estructural en torno al casi 4% del Producto Interno Bruto (PIB) que establece la Ley de Presupuesto 2022, y señaló que los nuevos gastos que lleve adelante su gobierno se financiarán con los fondos de libre disposición del erario y de las “múltiples flexibilidades” que entrega la ley para la reasignación de recursos.

Detalló también que a partir de 2023 su gobierno va a iniciar una reducción gradual del déficit estructural, para lo que es “fundamental”

llevar a cabo una reforma tributaria. En un guiño al presidente de la CPC, Juan Sutil, destacó que el empresario haya mencionado el punto en su discurso. “Una reforma tributaria tiene que ser conversada, tiene que ser en beneficio de todos los chilenos, tiene que apuntar hacia mayor equidad, y por lo tanto no puede verse como una confrontación entre buenos y malos”, dijo.

El Presidente electo también aseguró que enfrentar los desafíos de la sociedad de manera fiscalmente responsable requiere aumentar los ingresos permanentes, y planteó que, debido a la alta desigualdad, este “esfuerzo adicional” debe venir de las personas de más altos ingresos y patrimonios.

“Esta reforma tributaria no debe ser vista como una reforma tributaria de nuestro gobierno ni como un enfrentamiento entre clases sociales. Esta reforma debe verse como un nuevo pacto fiscal que sea producto de un diálogo social amplio, cuyos cambios sean duraderos y estables en el tiempo”, afirmó.

Recordó que, con los recursos adicionales que recaudaría esta reforma, se busca construir un país más equitativo, cohesionado, con una mejor educación, más productivo y protagonista en la respuesta a la crisis climática.

“Se requiere un esfuerzo que vaya más allá del gobierno de turno, no puede ser un esfuerzo partisano”, dijo Boric entre aplausos del público, que también recibió al abordar la importancia de la responsabilidad fiscal y cuando aseguró que “los colegios tienen que ser los últimos en cerrar y los primeros en abrir”.

“Decisiones de última hora”

El futuro mandatario aprovechó la instancia para hacer ciertos reparos a la saliente administración Piñera. “Pareciera haberse hecho costumbre en Chile que cuando hay alternancia de coaliciones políticas en el poder, en particular en el Ejecutivo, el gobierno saliente aprovecha sus últimas semanas post elección para realizar diversas modificaciones que comprometen no solo al gobierno entrante, sino al Estado de Chile, y a veces por muchos años”, criticó.

La reciente licitación del litio, la designación de cargos de larga duración en instituciones como el Servel y la modificación de contratos en las reparticiones públicas fueron algunos de los ejemplos que dio Boric. Luego, invitó al gobierno y a toda la institucionalidad política a que “convengamos en que no es deseable tomar decisiones de última hora, más allá de su legalidad”.

Boric también abordó el financiamiento de la Pensión Garantizada Universal (PGU), y recordó que junto a su equipo le han presentado al gobierno un pool de alternativas, pensando principalmente en las exenciones tributarias, para acoger lo que han planteado el Consejo Fiscal Autónomo (CFA) y otros economistas.

“A mí sinceramente la competencia por quién pone la firma en cuestiones que son de beneficio para todos los chilenos no me interesa. Me interesa que logremos subir las pensiones para la mayoría de las chilenas y chilenos de manera sostenible y responsable en el tiempo”, afirmó. Y agregó que si eso son capaces de lograrlo en estos días que quedan de enero y los primeros de marzo, “bienvenido sea”.

“Mis palabras respecto a la gradualidad y a la responsabilidad fiscal no eran un disfraz de campaña de segunda vuelta, sino una convicción profunda”.

“Así como no podemos depredar hoy la naturaleza que le daremos a quienes hoy son niñas y niños, tampoco podemos endeudarnos de manera irresponsable con cargo a la capacidad de gasto de futuras generaciones”.

PORTADA

es-cl

2022-01-14T08:00:00.0000000Z

2022-01-14T08:00:00.0000000Z

https://diariofinanciero.pressreader.com/article/281487869710340

Diario Financiero